Candelario


proceso creativo-metodología
Urbanizame - Performance 2009







La concepción de una performance para Candelario implica un desbordamiento expresivo a través de cuatro  manifestaciones diferentes de las artes visuales: dibujo, performance, video y pintura. Perfectamente estructurado como metodología de trabajo, cada uno de estos soportes contiene la obra artística y consiente el funcionamiento de ellos como un todo; sin embargo, escindidos de su contexto originario, adquieren autonomía artística.

Las primeras creaciones de Candelario, o expectaciones contextuales, se acrisolan en el dibujo. Este primer momento del proceso creativo, nunca analogía o croquis de la performance, constituye una estampida iconográfica-conceptual y funciona como la expresión tácita de la obra en sí.
La performance es sin dudas la etapa más exquisita de esta metodología creativa. Su carácter perecedero no mella la riqueza expresiva que implica la acción per se. Candelario a través de la performance contrae la distancia entre el arte y los espectadores, facilita la interacción artista-público-contexto.
Contrapuesto al carácter efímero de la performance, Candelario se vale del video para perpetuar, desde lo visual, la riqueza extraordinaria de la performance en el contexto que le dio origen ¿Cómo relatar una performance? ¿Cómo reproducir todo el andamiaje teórico-práctico que la hace funcionar? Si bien es cierto que la reproducción audiovisual de una performance es incapaz de recrear atmósferas y captar todo lo que sucede durante la misma, es una fuente fidedigna que muestra más de lo que explica.
La pintura, acción de cierre en alguna medida, permite a Candelario devolver al contexto (como obra de arte) la aprehensión de las experiencias vividas desde al performance. La síntesis, y no a reproducción, es el objetivo de la pintura, en tanto descontextualización del acto performático y recontextualización del proceso creativo. Esta forma expresiva genera un nuevo proceso de recepción, propone al espectador un híbrido de la investigación teórica, la concepción de la obra y la performance en sí.

La compleja plataforma creativa que desarrolla Candelario para cada una de sus performances busca reivindicar la relación del artista con las artes plásticas, entendidas en sentido multidisciplinar: trasciende así la individualidad de cada manifestación, e integra de forma dialógica las artes visuales al contexto, y viceversa.

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